Historia

Historia de la fundación

Santa Teresa Benedicta de la Cruz (Edith Stein 1891-1942), nació en Alemania. Se doctoró en filosofía en la universidad de Friburgo de Brigau. Se convirtió al cristianismo e ingresó en un convento carmelita. Murió en las cámaras de gas de Auschwitz, por sostener su testimonio de fe.

Cuando buscamos un nombre que realmente explique la naturaleza de la Fundación, hallamos en Santa Teresa Benedicta de la Cruz la plasmación perfecta, llevada hasta el extremo de la entrega de su propia vida, del compromiso sincero en la búsqueda de la Verdad. La búsqueda de la Verdad está en la esencia del hombre y toda tarea de investigación cualquiera sea la disciplina, es una búsqueda, aunque parcial, para alcanzar la verdad y el bien común, y eso es lo que queremos hacer en nuestro trabajo cotidiano, que es la investigación y la transferencia de conocimientos.

Esta casa, la Fundación de Investigaciones Científicas Teresa Benedicta de la Cruz, abre sus puertas para la "Investigación científica, la docencia, la capacitación y la transferencia de conocimientos, en el campo de los alimentos, desde la producción primaria hasta el consumidor"
(Cf. Estatuto Capítulo 1º, artículo 2).

Queremos ofrecer cursos de capacitación y actualización para profesionales, invitar investigadores de otros países, hacer jornadas para productores, acopiadores, empresas que manufacturen alimentos; queremos llevar a cabo publicaciones de divulgación y científicas, ofrecer un espacio para intercambiar conocimientos y crecer. Y por encima de todo, deseamos que, tal como lo vivió Santa Teresa Benedicta de la Cruz, la búsqueda de la verdad se extienda y comprometa, en todos los órdenes, la vida de las personas que de una forma u otra estén relacionadas con la Fundación.

Por eso quienes iniciamos esta institución, hacemos nuestras estas palabras: "La esperanza de construir un mundo más justo y más digno del hombre, avivada la espera del tercer milenio ya a las puertas, no puedo ignorar que los esfuerzos humanos de nada sirven si no están acompañados por la gracia divina: Si el Señor no construye la casa, en vano se afanan los constructores"
(Juan Pablo II, al declarar co-patrona de Europa a Santa Teresa Benedicta de la Cruz)

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